El mundo necesita producir más minerales para apoyar la transición a la energía verde. Para satisfacer las necesidades previstas de cobre, será necesario poner en producción hasta 200 nuevas grandes minas de aquí a 2050, a un ritmo de hasta 6 nuevas minas cada año. En pocas palabras, esto será muy difícil de conseguir: en la actualidad, las nuevas grandes minas de cobre tardan una media de 23 años en desarrollarse, requieren la adquisición de aproximadamente 8.000 hectáreas de terreno y a menudo exigen el desplazamiento de numerosas comunidades y hogares. En este documento, Gerry Reddy y Mike Steyn, directores de la SRA, esbozan un nuevo enfoque del desarrollo minero y, en particular, de la adquisición de tierras, que permite (a) un desarrollo minero más rápido y rentable, (b) la minimización de los impactos de la adquisición de tierras y (c) formas creativas de mitigar los impactos de los desplazamientos que se producen.